Acaso creíste que ser recien llegado era no ser?
Ya tuviste dioses, alabanzas. Cuero, sed, llorar, estrellas. Y nunca habia llegado.
Creciste en leyes, comiste alcohol, anduviste estepado por la noche que la ausencia nunca esconde.
Acaso fuiste algo, amigo mio?
Sos la vida de dos, entendiendo la vida como un cago de risa.
Y ya cagadas las letrinas, y sus gusanos sin nada mas que moneda, la reina es tuya.
Acaso habias pensado imposible amar mas?
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